Javier Milei escaló este lunes el conflicto con Victoria Villarruel, cuando Alejandro Fantino le preguntó en Neura por qué no hablaba con la Vicepresidenta para pedirle que desactiven el aumento. «Dice que no puede hacer nada. No sé, Martín (Menem) hace, qué se yo, recortó un montón de privilegios», contestó el primer mandatario.
«Cuando vos vas a laburar, hacés un acuerdo con tu empleador de cuánto ganás. No como la mierda de los senadores que levantan la manito y se suben la dieta, y se inventan el aguinaldo. Se subieron dos veces la dieta», había dicho el Presidente un minuto antes.
En medio de la tensión, Villarruel le respondió este martes por Twitter, utilizando como excusa el mensaje que un seguidor le dejó en su cuenta a modo de reproche. Un uusario le reclamó que bajar «los monstruosos sueldos» a los senadores y ella replicó: «Para terminar con los comentarios ignorantes, no cobro aguinaldo y mi sueldo está congelado desde el año pasado. No soy senadora, por lo que no decido sobre sus elecciones en el recinto, que es diferente en sus reglas a la Cámara de Diputados».
La Vicepresidenta aprovechó también para desearle a su interlocutor una «feliz Navidad» y que el 2025 lo encuentre «con más sabiduría» que el año que se va.
La pelea entre Milei y Villarruel se agudiza cada vez más. Como informó LPO este lunes, la Vice salió airosa de la operación en su contra que había montado el gobierno para responsabilizarse por las horas de acefalía que se produjeron cuando el Presidente viajó a Italia y ella condujo la sesión que terminó con la expulsión de Edgardo Kueider.
Por un pedido de acceso a la información pública formulado por el diputado lilito Maximiliano Ferraro, se conoció el acta firmada por el escribano de Casa Rosada y Villarruel, hecho que ocurrió a las 19, después que terminó la tarea parlamentaria del jueves 12 de diciembre.
La discusión por las dietas de los senadores encuentra a Villarruel aislada en la Cámara Alta, donde ni siquiera los aliados del oficialismo la acompañaron en su idea de convocar a una sesión para abortar el incremento de sueldos. Arrinconada, habría empezado a evaluar la alternativa sugerida por senadores como Juan Carlos Romero y Carlos «Camau» Espínola, quienes proponen firmar una nota dirigida a la Secretaría Administrativa para que prorrogue el congelamiento de las dietas dispuesto en agosto pasado.
El problema es que esa jugada licuaría su protagonismo en la agenda de la austeridad, razón por la cual sigue pujando para imponerse en la definición de las dietas aunque sea por decreto, una de las facultades que la asiste como titular del cuerpo.