El conflicto entre Mauro Icardi y Wanda Nara llegó a su límite el viernes a la noche. Por decisión de la justicia, el futbolista se reencontró con sus dos hijas Francesca e Isabella, pero un problema con las mascotas de las niñas hizo que regresara a la casa de su exesposa. Dentro del edificio Chateau Libertador se vivió una tensa situación en la que, según las imágenes que se viralizaron, él deseaba llevarse a las niñas, pero ellas no querían irse con él. Hubo gritos, llantos y tuvo que intervenir la Policía, el SAME, los representantes legales de ambas partes. Tras el violento momento que se vivió, trascendió que las tres abogadas del futbolista habrían presentado la renuncia.
“Renunciaron las tres abogadas de Icardi, Elba Marcovecchio, Lara Piro y Guadalupe Guerrero”, sostuvo este sábado Ángel de Brito a través de su cuenta de Instagram. Contó que habría sido por “diferencias irreconciliables” y agregó que el “episodio policial” que tuvo lugar el viernes por la noche “fue el desencadenante”.
“Icardi ya se contactó con nuevos abogados esta mañana para encarar su defensa”, informó el conductor de LAM (América). Tras el altercado del viernes, el futbolista se retiró del edificio sin sus hijas, puesto que habrían ordenado su detención.
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