Los acreedores de la provincia de La Rioja emitieron este martes un duro comunicado en respuesta al anuncio del gobernador Ricardo Quintela de que cayó en default de su deuda externa por no tener fondos disponibles, en medio de la pelea de las provincias con la Nación por fondos de la coparticipación y el recorte a las transferencias discrecionales.
«Defaulteador recalcitrante y reincidente«, le dijo el Comité Ad Hoc de Bonistas que tienen un bono verde reestructurado previamente y que vence en el 2028.
La explicación del gobernador acerca de su incumplimiento de pago, «que atribuye a la situación económica actual de la Argentina es totalmente impropia». «De hecho, el problema de la provincia es el desdén de su gobierno por cumplir con sus obligaciones legales y contractuales», cuestionaron los acreedores.
«La mayor parte de los fondos provenientes de la emisión del Bono Verde fueron para la construcción de sus parques eólicos bajo el nombre de Parque Eólico Arauco. En diciembre 2022, La Rioja vendió la totalidad de Vientos de Arauco Renovables por una cifra de 171 millones de dólares a Pampa Energía«, recordaron.
«En consecuencia, habiendo pedido prestado dinero a los bonistas para construir este proyecto, la provincia luego lo vende y ahora pretende no tener plata para pagar u$s 16 millones de capital. Las excusas son las de un defaulteador recalcitrante y reincidente», apuntaron.
Para los bonistas, La Rioja «nunca tuvo la intención de hacer los pagos acordados del Bono Verde (que derivan de un default previo del 2020 y de una reestructuración del 2021). En septiembre 2023, representantes de la provincia ya se habían comunicado con los bonistas informando que querían reestructurar su deuda. El incumplimiento de pago que venció el 24 de febrero fue premeditado y no debido a circunstancias críticas».
«Mientras que otras provincias de Argentina están haciendo esfuerzos considerables para dar cumplimiento al pago de sus deudas y mejorar su reputación crediticia, La Rioja se distingue a si misma con una serie de antecedentes dudosos: una de las primeras provincias en declararse en default en el 2020, la última en reestructurar su deuda en 2021 y la primera (y única) en defaultear su deuda reestructurada», cuestionaron.
Por eso, el Grupo Ad Hoc llamó a la provincia a «modificar su enfoque y a honrar sus obligaciones contractuales. Pedir dinero que fuera prestado en buena fe por los inversores, usarlo para construir un valioso parque eólico, venderlo por u$s 171 millones y luego defaultear a los bonistas cuyo capital hizo esto posible, es vergonzoso y deshonesto».
«El comportamiento de La Rioja es dañino para la reputación crediticia de la Argentina y las provincias y limitará las oportunidades económicas para la población. La provincia ha expresado sus intenciones de atraer inversiones para la explotación de litio y minería, áreas en donde está altamente rezagada respecto a sus vecinas. Sin embargo, es difícil de entender por qué los inversores tendrían interés en invertir en el largo plazo en una provincia que no trata a sus contrapartes de buena fe ni respeta sus compromisos legales», recordaron, y anticiparon que se reservan sus derechos para ir a juicio si los pagos de capital e intereses se siguen demorando.