“Tuve un montón de técnicos en mi carrera y aprendí lo bueno y lo malo de todos. Incluso, aprendés de los que no tuviste, ni están. Uno de los referentes es Carlo Ancelotti por verlo trabajar, a quien escucho y me siento identificado. Otros son los que tuve como José (Pekerman), (Javier) Irureta en el Dépor (La Coruña) y el profe Daniel Córdoba, que me transmitió un montón de cosas”. De esta manera, en una reciente entrevista Lionel Scaloni repartía elogios para varios entrenadores. Uno de ellos, fue Irureta, quién lo dirigió en La Coruña, entre 1998 y 2005. Allí, juntos ganaron cuatro títulos: una Liga, una Copa del Rey y dos Supercopas de España.
La relación entre ambos viene de lejos. El Vasco Irureta fue el entrenador de la época más dorada del Dépor, en la que el hombre de Pujato ocupaba el andarivel derecho de la defensa. “Para mí, es el mejor entrenador del mundo. Lo tuve conmigo y sé cómo trabaja. Es una persona que siempre está muy atenta, ya en su etapa como jugador siempre veía todo y era un líder. Pregona siempre un clima favorable en el grupo y no tuvo riña. Era un adelantado y a mí me ayudaba mucho. Es muy buena persona”, contó el español, de 76 años.
Irureta tuvo una extensa trayectoria como jugador del Atlético de Madrid, en el que ganó dos ligas, una Copa del Rey, una Copa Intercontinental y obtuvo un subcampeonato de la antigua Copa de Europa -hoy Champions League-. Además, el ex mediocentro ofensivo jugó en el Athletic Bilbao, donde se retiró con 32 años, en 1980. Tras colgar los botines, empezó su carrera como director técnico y trabajó durante 27 temporadas consecutivas en su país, convirtiéndose en el segundo entrenador con más partidos dirigidos en la Liga española con 613 encuentros, detrás de Luis Aragonés que lo hizo en 757 oportunidades.
“Fue muy importante mi paso por el Deportivo La Coruña. Fue donde más tiempo estuve dirigiendo. En siete años, gané cuatro títulos. Fue uno de los mejores momentos de mi carrera y ahí conocí a Scaloni”, recuerda el oriundo de Guipúzcoa, quién llevó a su equipo a semifinales de la entonces denominada Copa de Europa (hoy Liga de Campeones) y a los cuartos de final en otras dos ocasiones.
“Scaloni tiene un deseo si viene aquí (España) de dirigir al Deportivo La Coruña, donde ha sido muy feliz. Es un equipo que le dará buenas sensaciones, porque lo conoce y donde podrá llevar adelante todos sus conocimientos. Pero también, tiene condiciones para dirigir al Barcelona, el Real Madrid o el Atlético de Madrid, sin dudas”, recalca desde Madrid el experimentado orientador, en diálogo con Infobae.
– ¿Qué es de su vida, Javier?
– Estoy retirado, y veo mucho fútbol. Sigo al Athletic Bilbao y realmente estoy fuera del ámbito futbolístico. Pero me gusta y sigo viendo fútbol. Ya colgué el buzo de entrenador. Estuve durante muchos años dirigiendo tras mi carrera como jugador de más de 15 años. Debuté en 1967 en el Atlético de Madrid, donde jugué hasta 1975. Ese año, pasé al Bilbao hasta 1980, año que me retiré como futbolista.
– ¿Extraña dirigir?
– Sí, se extraña. Pero desde hace 13 años que no dirijo. Como entrenador, estuve desde 1984 hasta el 2008, mucho tiempo. Luego, pasé a ser director de fútbol base del Bilbao hasta que dirigí la selección de Euskadi en el 2011, y luego lo dejé todo. Mi mejor momento fue cuando estuve en la Primera División del Athletic de Bilbao, donde estuve dos temporadas, entre 1994 y 1995.
– ¿Cómo observa la Liga de España?
– Es un juego muy fuerte. Los equipos del futbol español suelen estar bastante bien. Me gustan varios equipos, lo que hacen en las ligas y en las copas internacionales; aunque el Atlético Madrid no está pasando por un buen momento y está jugando de una forma extraña.
– En ese periodo que dirigió al Deportivo La Coruña lo tuvo a Lionel Scaloni como futbolista. ¿Qué recuerdos tiene de él?
– Buenos recueros, los mejores. Desde luego, fue un jugador con muchas condiciones en el campo de juego, y de líder. Pero lo que más rescato es que es una buena persona. Aunque no jugase, siempre era positivo, y tenía muy buen comportamiento. Estuve muy contento con él porque sumaba desde todos lados. Me alegro mucho haberlo tenido y disfrutado, y que siga haciendo las cosas bien, como siempre las hizo cuando era futbolista.
– ¿Lo observa a futuro como director técnico en el futbol español?
– (Risas) Tiene un deseo si viene aquí (España) de dirigir al Deportivo La Coruña, donde ha sido muy feliz. Es un equipo que le dará buenas sensaciones porque lo conoce y es donde podrá llevar adelante todos sus conocimientos. Yo creo que ya lo está pensando. Él es muy buena persona, y lo remarco siempre porque tengo los mejores recuerdos. Pasamos muy buenos momentos juntos y tuvimos charlas enriquecedoras. Él siempre dice que le gustaría ir al Deportivo (La Coruña) y yo creo que en algún momento se le va a dar. Me gusta Scaloni para el Deportivo en este momento, pero está en la selección argentina y es difícil que pueda salir. Pero el cariño que tiene con ese club es especial, y eso no se podrá dejar de lado. Es el mejor entrenador del mundo.
– Scaloni lo eligió a usted como uno de los referentes que tuvo en su carrera. ¿Qué le enseñó como entrenador para que lo defina de esa manera?
– Es una muy buena persona y en su momento en el Dépor tenía muchas cosas que decir y hablar, era un líder en el campo de juego. Era un hombre que estaba muy bien, y en ninguno momento tuvo una riña con algún compañero, lo querían todos. Siempre muy amable con sus compañeros y todos le tenían respeto. Fue un jugador que me gustó muchísimo y hablábamos mucho. Me preguntaba cómo manejar un vestuario y les contaba mis experiencias. De eso, uno aprende. Se llevaba muy bien con todos los integrantes del cuerpo técnico y eso también es fundamental.
– ¿Es un entrenador que está para dirigir a los grandes equipos de España?
– Sí, yo creo que sí. Está para dirigir al Barcelona, al Real Madrid o al Atlético, sin dudas. Es un entrenador que tiene buenas condiciones. Además, hablan muy bien de él sus jugadores y fijate que se lleva bien con todos. Es muy buena persona.
-Hoy, en el Atlético de Madrid está Diego Simeone. ¿Cómo lo observa al Cholo?
– Es un club difícil para dirigir. A Scaloni lo tuve cinco años en La Coruña y el Cholo ha jugado mucho tiempo en el Atlético, pero está pasando por un momento muy difícil. Ha hecho su camino y eso es lo más complicado, por eso tiene espalda para mantenerse en el Atlético. Pero Scaloni puede entrenar en cualquier equipo, sin dudas, y encima puede hacer un gran trabajo como lo está haciendo en la selección argentina.
– ¿Ve similitudes entre Scaloni y Guardiola?
– Guardiola es un técnico muy grande, de mucho trabajo, de mucha experiencia, un hombre serio, y podría tener una similitud con Scaloni. Son entrenadores de muy buen nivel y lo demuestran a diario. A Pep le está yendo bien en el Manchester City y Scaloni es campeón del Mundo y de América. Creo que son los dos mejores entrenadores del mundo. Scaloni no ha tenido un equipo todavía, pero condiciones le sobran. Cuando deje la selección argentina, sería muy bueno para él que elija España para dirigir a un equipo. A Pep le faltaría dirigir una selección, esa es la única diferencia que existe entre ambos.
– España es la mejor selección de Europa, y Argentina la mejor de América y del Mundo. ¿Son seleccionados distintos o en algo se parecen?
– Sí, se parecen en que ambas son las mejores del mundo, sin dudas. Las dos son muy competitivas, y buenas. Seguí de cerca el futbol de la selección argentina desde que asumió Scaloni y es muy bueno todo lo que generó. España este año se transformó en un equipo poderoso, con chavales que están creciendo. Ambas selecciones tienen un aire de grandeza y por eso logran los resultados que se proponen.
– ¿Fue llamado alguna vez para dirigir en el fútbol argentino?
– No, nunca. Me hubiera gustado dirigir a Boca o River que es como decir Barcelona o Real Madrid. Los dos son poderosos. Esos equipos son difíciles de dirigir, pero me hubiese gustado tomar ese desafío.
– Tuvo a Iker Muniain en el Bilbao. ¿Qué le puede dar a San Lorenzo de Almagro?
– Es un jugador que hizo una muy buena carrera; un gran chaval. Tengo mucha amistad con él y está muy entusiasmado de jugar en el fútbol argentino. Juega bien y hace jugar a sus compañeros. Tiene buen manejo de pelota, es su fuerte. Sabe utilizar las dos piernas, no es alto, pero es un jugador que siempre está bien parado. Estoy seguro de que hará en Argentina una buena campaña con San Lorenzo. Cuando estuve en el Bilbao, él estaba conmigo y jugaba seguido, lo conozco bien; y es un futbolista para el fútbol argentino.