En medio de la expectativa por la posible llegada definitiva de Franco Colapinto a la Fórmula 1 si consigue un asiento para 2025, otro argentino apareció en el mapa para alimentar la ilusión de volver a tener un corredor nacional en la máxima competencia de automovilismo. Se trata de Nicolás Varrone, piloto oficial de General Motors, la escudería que desembarcará en la F1 con Cadillac en 2026. “De todos los pilotos, soy uno de los más valorados y reconocidos por la marca, y el más joven también”, destacó este miércoles.
“Cuando salió la noticia se armó una gran movida en redes sociales, para mi eso es algo nuevo. Mismo desde General Motors hubo una respuesta positiva de que no podían creer la atracción de la gente en la Argentina. Eso dejó una buena impresión para una butaca en 2026″, adelantó Varrone en diálogo con Radio Mitre.
Y sumó: “Yo sabía que iban a incursionar en la Fórmula 1. Ya hace dos años que voy al simulador y veía que en el calendario de todas las categorías estaba la F1″.
“Con todo esto, en estos días hubo movimientos de empresas que se quieren sumar. Me sorprendió para bien, bienvenida toda la gente que quiera sumarse”, dijo al referirse al costo que tiene llegar a participar de las competencias y lo difícil que es obtener sponsors privados que apoyen a los deportistas. “No solo para entrar a la F1, todo el camino previo es carísimo, estamos hablando de muchísimo dinero”, afirmó.
El joven de 23 años, oriundo de Ingeniero Maschwitz, es campeón del Mundial de Resistencia de la FIA (Federación Internacional del Automóvil) y de las 24 Horas de Le Mans, una de las carreras más importantes del mundo. “Ganar Le Mans fue una locura. Estar ahí, ver la previa a la carrera, la gente, la historia, la presión que teníamos”, contó y recordó: “El equipo hablaba todo el año de eso, es súper difícil. Clasificamos todas las vueltas y me quedé con el récord de vuelta”.
También hizo un breve repaso sobre su carrera y los eventos más importantes. “Tuve un golpe fuerte en 2020, cuando estaba haciendo la transición a lo que era resistencia”, contó y sumó: “Tuve un fallo mecánico en una curva y me pegué una piña espectacular. Esa fue la más fuerte: perdí el auto a 255 kilómetros por hora y choqué a alrededor de 200. Cerré los ojos y dije ‘bueno, esto me va a doler’. Uno ve las medidas de seguridad de los autos de carrera y son increíbles: es tremendo ver los golpes que se pegan y cómo los pilotos salen caminando”.
Por otro lado, Varrone se refirió al furor tras la llegada de Franco Colapinto a la escudería Williams y las expectativas sobre sí tendrá un lugar fijo el año entrante. “Con Franco somos muy amigos desde chicos, corríamos en el mismo equipo de karting y los primeros viajes a Europa los hicimos juntos”, reveló y manifestó: “Me pone muy contento por él. Abrió los ojos no solo a la Argentina sino a la Fórmula 1 de que la Argentina es un país muy fierrero; es algo que abre muchas puertas en muchos sentidos”.
Las declaraciones del argentino se dan luego de que este lunes la compañía estadounidense de automóviles anunciara haber alcanzado un acuerdo con la Fórmula 1 para que su marca GM/Cadillac se convierta en el undécimo equipo de la parrilla en la temporada 2026, por lo que pasará a haber 22 pilotos compitiendo en ese curso. “A lo largo de este año, dejaron claro su compromiso de utilizar la marca GM/Cadillac como undécimo equipo, y que GM entrará como proveedor de motores en un momento posterior. Por lo tanto, la Fórmula 1 se complace en seguir adelante con este proceso”, señalaron los organizadores.
En este contexto, finamente, Varrone se refirió a los desafíos a los que se enfrentan como pilotos y el exigente estilo de vida que están obligados a llevar. “Como todo deportista de alto rendimiento, es importante estar bien alimentado y son muy exigentes con eso”, marcó y agregó: “Pasamos mucho calor arriba del auto así que la hidratación es muy importante. En carreras largas, de dos o tres horas, podemos perder hasta tres kilos de agua”.
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