Comprar un pasaje de avión no suele ser una decisión que incluya reflexionar sobre la seguridad del asiento. La mayoría elige su lugar según comodidad, vista o cercanía a la salida. Sin embargo, cada vez más viajeros se preguntan si realmente existe una ubicación más segura en caso de una emergencia. La respuesta no es simple, pero los datos y los estudios realizados por expertos en aeronáutica confirman que sí existen sectores con mayores probabilidades de supervivencia.
A pesar de que el avión sigue siendo el medio de transporte más seguro del mundo, con apenas un accidente cada 880 mil vuelos en 2024, según datos de la IATA (Asociación Internacional de Transporte Aéreo), las tragedias aéreas, por poco frecuentes que sean, siguen generando impacto global. Tal fue el caso del accidente de Air India en el que fallecieron 241 personas y solo un pasajero sobrevivió.
Para los expertos es importante recordar a la población que no existe un asiento infalible y que cada accidente tiene variables únicas, ya sea por el tipo de aeronave, ángulo de impacto, velocidad o condiciones climáticas. Sin embargo, hay patrones que se repiten, y eso permitió a los investigadores identificar zonas que tienden a ofrecer mejores resultados en términos de supervivencia.
Un estudio realizado por la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) y respaldado por el Ministerio de Aviación Civil británico indica que los asientos ubicados en la parte media y trasera del avión suelen ofrecer mayores niveles de protección. Esto se debe, en parte, a que la estructura cerca de las alas es más robusta y absorbe mejor los impactos.
En contraste, una simulación del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) reveló que los pasajeros que se encuentran cerca de las alas son más propensos a tener lesiones graves en las piernas o la zona abdominal. Según este análisis, las últimas filas, en especial las del pasillo, ofrecieron mejores tasas de supervivencia en los ensayos.
Una revisión de la revista Time, basada en accidentes aéreos ocurridos entre 1985 y 2000, concluyó que los pasajeros ubicados en los asientos traseros del avión tenían un 71% de tasa de supervivencia, frente al 62% en la zona media y 49% en la delantera.
Seis consejos prácticos para aumentar la seguridad a la hora de volar
Más allá de la ubicación del asiento, los especialistas en seguridad aérea insisten en que el factor humano y la preparación personal son determinantes para la supervivencia. Estas son algunas recomendaciones clave: